A pesar de una mañana gris de diciembre, los alumnos y sus profesores se dirigieron al centro de Gronau. Su destino era la iglesia de San Antonio, donde se celebraba el servicio anual de Adviento. En el interior de la iglesia, una iluminación suave y cálida creaba una atmósfera que ambientaba el tiempo de Adviento.
El servicio fue dirigido por el padre Thomas Klümper, de la parroquia católica, y el diácono Lukas Klee, de la parroquia protestante. Se centró en el poder simbólico de una vela, cuya luz y calor proporcionan guía y consuelo incluso en los momentos oscuros. Las intercesiones fueron acompañadas por niños que encendieron una vela por cada petición. Después de cada intercesión se cantó también una estrofa de la canción "Lleva ahora una luz al mundo", que acentuó de forma impresionante la idea de la luz.
Entre las oraciones y la historia que se leyó en voz alta, resonaron cantos por toda la nave. Estos cantos también se centraron en el tema de la luz de las velas y en cómo los niños pueden traer luz a la oscuridad. Una característica especial del canto fue que las canciones iban acompañadas por el órgano. Esto dio al servicio un ambiente animado y al mismo tiempo festivo.
La mañana dejó una impresión duradera en todos los participantes y puso de relieve la importancia de la esperanza y la confianza en tiempos difíciles.
El personal de la escuela de Buterland desea a todos un Adviento tranquilo y unas felices fiestas.

